La Surface RT de Microsoft, pese a las buenas perspectivas con las que nacía, no levanta cabeza. A la noticia de la drástica reducción de 150 dólares en su precio se une ahora el dato de que se estiman en unos 900 millones de dólares las perdidas del gigante de Redmond por las bajas ventas del dispositivo.
La Surface RT va camino de repetir los mismos pasos del fiasco que hace un año tuvo Blackberry Playbook. Como en el caso de la compañía canadiense, el tablet de Microsoft aterrizaba con la vitola de ser el “iPad Killer” pero las malas ventas lo están abocando al fracaso.
Como indican los compañeros de SoftZone, los productos con Windows RT, es decir, las tablets Surface son el punto negro de unas, por otra parte, no tan malas cifras de Microsoft. Las cuentas generales que ha hecho públicas la empresa fundada por Bill Gates se han saldado con 19.900 millones de dólares en ingresos y 4.970 millones de dólares en beneficios. Sin embargo, el segmento de la Surface RT arroja unas pérdidas de 900 millones de dólares.
Las razones de este desatino son varias. La primera es cierta soberbia y demasiado optimismo a la hora de preveer las ventas. A finales del año pasado, se anunció que Microsoft iba a fabricar entre tres y cinco millones de tablets Surface RT para satisfacer la demanda, que finalmente en marzo no llegaba al millón de ventas. Esto se traduce en muchas tablets almacenadas y sin vender que, a cada mes que pasa, hacen el agujero de las pérdidas más grandes.
Por otra parte, otro de los problemas de Surface RT está en su propia casa, y se llama Windows 8. Los usuarios, que pese a lo que puedan pensar algunas empresas suelen darse cuenta cuando hay algo mejor a mano y le han dado la espalda a este sistema en favor de las mismas Surface…pero con Windows 8. A esto se le ha unido un precio de 499 dólares, por encima de las ofertas de otros fabricantes como Asus o Samsung, y no muy lejano de las que también vende Microsoft.
Y lo cierto es que la Surface RT es un muy buen producto, pero Microsoft no ha sabido diferenciarlo de las propuestas con Windows 8. A ojos de un consumidor son más completas ya que Windows RT es un sistema visualmente parecido a Windows 8 pero en realidad, limitado precisamente por su orientación a tablets.
La última medida, a la desesperada exactamente igual que hizo Blackberry con el Playbook, ha sido una drástica rebaja del precio de los dispositivos de 150 dólares, aunque nos tememos que es el canto de cisne del tablet y servirá sólo limpiar los almacenes de Surface RT y no como estrategia de cara al futuro.
